Los tiempos recorren las calles por mí
Los tiempos recorren las calles por mi adentro
soy espejo en astillas donde miles
de rostros guindan su mirada lánguida o perjura,
felicísima o cruenta
sea el caso en ciernes
El tiempo me camina mientras corro
escapando de mis propias venas
El mismo perro perdido cien veces
con la quijada rota de tanto pavimento mordido
En el desprestigio mismo de estar sin querer estando
Con todo este tiempo vagando en mis costillas
Con esta hambre de años que no sacia ninguna suerte
Con estos deseos incansables de recorrerlo todo hasta el último cascarón de los desiertos.
Autor